El buen tiempo, el tiempo libre, los cambios de hábitos y la vida social aportan muchos beneficios a tu cuerpo y mente en verano. Descúbrelos a continuación. Clic para tuitear
El verano suele asociarse a muchas experiencias positivas. Llegan las vacaciones. Puedes relajarte y desconectar de tu día a día. Pero, además de esta buena energía veraniega, hay beneficios para la salud mental y física.
El verano y el cuerpo
Con el inicio del verano, los días tienen más horas de luz y puede parecer que tienes más tiempo para hacer cosas, especialmente, planes. Esto, sumado a la buena temperatura, lleva a hacer más actividades al aire libre.
Ejercicio
Caminar, correr, hacer senderismo, nadar, surfear, bucear, etc. Muchos deportes son más accesibles en verano que en invierno. El aumento de la actividad física potencia las conexiones neuronales, la oxigenación de la sangre y la sensación de bienestar gracias a la producción de serotonina, endorfinas y dopamina en el organismo.
Consumo de agua
Beber agua es necesario para el correcto funcionamiento del organismo. Estos son algunos de sus beneficios:
- Eliminar impurezas.
- Reducir la probabilidad de cálculos renales.
- Transportar nutrientes.
- Mantener la elasticidad de la piel.
- Regular el apetito.
- Prevenir el dolor de cabeza.
- Apoyar la digestión, la actividad muscular y la función cognitiva.
A veces no se bebe todo el agua que se debería, pero en verano, debido al calor, es probable que se tienda naturalmente a beber más agua, lo que ofrece todos estos beneficios.
Mejor nutrición
Al pensar en el verano, seguramente te imagines cenas con los amigos, comidas con la familia, aperitivos, etc. Es normal que al tener más vida social, tengas la sensación de que comes más en verano.
Sin embargo, el calor hace que sea más habitual ingerir comidas menos copiosas y pesadas, y se prefieran alimentos frescos como ensaladas, embutidos, frutas, cereales, yogures y otros aperitivos playeros.
Vitamina D
La vitamina D generalmente está relacionada con una mejora de la absorción de calcio necesaria para los huesos. Pero muchos órganos y tejidos del cuerpo tienen receptores para la vitamina D, lo que sugiere el importante papel que desempeña más allá de la salud ósea.
La vitamina D se encuentra naturalmente en los rayos ultravioleta-B (UVB) del sol, pero muchas personas tienen niveles insuficientes porque viven en lugares donde la luz solar es limitada en invierno, o porque tienen poca exposición al sol pues la mayor parte del tiempo están en interiores. Pero con la llegada del verano, esto cambia y es más fácil mantener unos niveles saludables de vitamina D en el organismo y aprovechar sus beneficios.
Impacto del verano en la mente
Cualquier impacto positivo en tu cuerpo tiene un efecto positivo en tu mente, pero el verano puede ser especialmente beneficioso para tu salud mental. ¿Por qué? Sigue leyendo para descubrirlo.
Las vacaciones, el final de curso, el trabajo a tiempo parcial y los días más largos permiten que tengas más tiempo para la vida social. Pasar tiempo con tus seres queridos, conocer gente nueva y fortalecer lazos ayuda a tu mente a sentirse feliz.
También es habitual que te alejes de las tecnologías de tu vida diaria. Te puedes olvidar del ordenador del trabajo, de prestar atención al teléfono móvil y reducir la cantidad de entradas visuales a las que tu cerebro suele estar expuesto. Esto activa otros procesos mentales, actividades más tranquilas o más creativas como pintar, leer, tejer, esculpir, hacer manualidades y escribir, entre otras muchas actividades.
¿Cómo aprovechar al máximo el verano?
Es posible que cuando tengas más tiempo libre no lo sepas gestionar de una manera adecuada y sientas que los días pasan demasiado rápido y no puedes compaginarlo con otras responsabilidades. Por eso, puedes organizar tus tareas para verlas con claridad y saber cuánto tiempo necesitas dedicarles para poder disfrutar del descanso.
También es importante que tomes las precauciones necesarias para que el verano no termine antes de tiempo. Por eso, es importante:
- Hacer estiramientos para evitar lesiones deportivas: no quieres que un esguince o una escayola limiten tu tiempo libre en verano.
- Usar protector solar: si te vas a exponer al sol durante un período largo de tiempo, como un día de picnic, en la piscina o en la playa, no te olvides del protector solar para evitar quemaduras que te obliguen a quedarte en la sombra.
- Hacerse las pruebas de Covid necesarias: Si vas a ir a grandes eventos como festivales, competiciones deportivas, mercadillos de verano, fiestas o viajes a sitios turísticos, recuerda que te puedes hacer pruebas antes de ir, para proteger a los demás, y al volver, para cuidar de tu salud. También te permitirá cumplir con los requisitos establecidos por muchos países para viajar de una forma segura.
Si ya tienes en mente algunos planes para el verano, programa un test de Covid y prepárate para volver a disfrutar del verano.
